La casa rodante para familias numerosas: terraza, hamacas y espacio de sobra
Un bus de dos pisos del 2009 que quedó fuera de servicio se convirtió en una casa rodante muy bien equipada y habitable para ocho personas. Conocela.
Tener una casa rodante sinónimo de aventura y, para disfrutarlo, no es necesario que sea 4×4 y pueda adentrarse en zonas inhóspitas: con que tenga todo lo necesario para pasar el día y la noche, alcanza y sobra para aquellos que poseen un espíritu con ansias de independencia y libertad.
Una familia danesa dueña de este pensamiento decidió abandonar la ciudad y adoptar un nuevo estilo de vida lleno de viajes. Hoy, Dane y Deena Eyerly recorren el país con sus seis hijos en un viejo bus de dos pisos que se convirtió en una increíble casa rodante.
Una casa rodante para ocho
Dane y Deena descubrieron que el tiempo que pasaban con sus hijos en casa no era suficiente. Sus trabajos y estilo de vida solo les permitían estar juntos solo dos horas al día. Por eso decidieron abandonar la vida en la ciudad y comenzaron a investigar qué significa vivir a tiempo completo en la ruta.
Así fue que encontraron una solución que podía satisfacer sus necesidades, viajar juntos y disfrutar de la libertad y la espontaneidad que conlleva el estilo de vida nómade. Sí, compraron bus de dos pisos Van Hool TD925 de 2009, desarrollado por ABC Companies, para transformarlo en una casa rodante.
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El modelo en cuestión mide 13,7 metros de largo y tiene casi 4 de alto (en su versión original transportaba hasta 81 pasajeros), por lo que ofrece suficiente espacio para mamá, papá y sus seis herederos. Su impulsor es un Cummins ISM de 10,8 litros y 450 caballos que se acopla a una caja automatizada ZF de 12 marchas.
Pero lo mejor de todo es que los propios dueños lo renovaron de pies a cabeza y lo convirtieron en su casa rodante de dos pisos. Para empezar, el área de la cabina es bastante espaciosa y también sirve como oficina para Dane. Ahí es donde guarda su computadora y la mayoría de los equipos que usa diariamente.
Unos pasos más adelante aparece la cocina, que tiene una heladera en un lado y un congelador del otro. Cuenta también con una amplia encimera, varios gabinetes y cajones para almacenamiento, un amplio fregadero, una placa de inducción con dos hornallas y un horno.
Detrás de la cocina se deja ver un comedor que se llena de luz gracias a los grandes ventanales del bus. Incluye dos sofás, uno de ellos con un respaldo que se eleva para transformarse en una mesa, mientras que detrás del otro hay un amplio escondite de almacenamiento: curiosamente, allí es donde la familia guarda sus ingredientes secos y otros artículos pequeños.
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En el primer nivel de esta casa rodante, mirando hacia la parte trasera, se encuentra uno de los baños. Sí, el modelo tiene dos baños que están separados de la ducha. Y si te preguntas dónde está eso, bueno, está ubicado justo entre los dos niveles del autobús.
Por su parte, la ducha tiene un ambiente de cabaña de troncos, y es más generosa que lo normal, lo que ofrece suficiente espacio para moverse. Arriba, la familia también instaló una unidad combinada de lavadora y secadora, y un área pequeña diseñada para lavandería.
Unos pasos más adelante están los dormitorios de los pequeños. Todos tienen su propia cama, que está personalizada para adaptarse a su estilo y necesidades. Más abajo en el pasillo está el segundo baño, el más diminuto de los dos.
Hacia el frente del primer piso hay otra sala de estar. Al igual que el comedor de la planta baja, este espacio tiene dos bancos grandes. Sin embargo, se colocan en un solo lado del autobús. Por supuesto, no puede faltar la gran mesa que se utiliza para estudiar o jugar.
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Luego está el dormitorio principal, que incluye una cama tamaño king que se pliega cuando los niños quieren tener más espacio para jugar. Lo curioso es que desde este espacio la familia puede acceder a la terraza, que cuenta con una baranda resistente para que los niños puedan colocar sus hamacas.
Según Dean, suelen hacer noches de cine en este espacio y disfrutan de las impresionantes vistas donde sea que se detengan. Como no podía faltar en una casa rodante moderna, cuatro paneles solares de 355 vatios se encargan de darle electricidad a todo los componentes que dependan de ella.
Fuente: autoevolution.com