Renault Magnum, el camión que marcó una nueva era en el transporte

Tres décadas atrás, Renault sorprendía al mundo de los pesados con la presentación de su revolucionario camión: el Magnum AE, conocido en su primer año de vida como AE 380. Un proyecto ambicioso que surgió en 1981 en Francia, conocido como Virage, donde previamente se construyó dos prototipos, uno en 1985 y el otro 1988.

Su diseño rompía claramente con los moldes y con él la marca francesa buscaba la habitabilidad y comodidad del conductor por encima de todas las cosas. Con este claro objetivo a la hora de desarrollarlo, el Magnum fue el primer camión con cabina de piso totalmente plano y una altura interior de 1,87 metros, que en versiones posteriores llegó a los 2 metros, sacrificando el diseño exterior.

Entre tantas innovaciones, su cabina estaba construida de acero con paneles de plástico, que aseguraba un menor peso y mayor resistencia a la corrosión, y estaba del chasis y de la cadena cinemática, como si fuera un módulo aparte, que aumentaba el espacio interior. ¿El parabrisas vertical? Otra gran novedad vista por primera vez en el Magnum.

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También el diseño de eje adelantado y el ascenso a la cabina por detrás de la rueda delantera fue un signo de que el camión provenía de un modelo americano. Sí, el Magnum fue desarrollado en primera instancia por Mack y Renault en 1979 para los mercados norteamericanos y australiano. Además, el uso de cuatro ópticas (en lugar de las clásicas dos), provenía del concepto de diseño americano.

Renault Magnum, una generación galardonada

Pero este sencillo diseño no tardó en cautivar a la gente ya que apenas un año después de su presentación mundial fue galardonado con el “Truck of the Year”, convirtiéndose en el mejor camión europeo de 1991. A lo largo de su historia, unos 23 años exactos, el Magnum AE mantuvo tres generaciones. Entre 1996 y 1997 recibió una profunda actualización, una renovación integral, por lo que pasó a ser el Renault Magnum Integral. Además de modificaciones estéticas y en la cabina, tenía una cadena cinemática mejorada y podía llevar un motor V8 de Mack Trucks, que entregaba de 500 a 560 CV.

Coincidiendo con el cambio de siglo, la marca francesa presentó la tercera generación del Magnum, con una cabina y un frontal rediseñados. Unos años después, ya en 2005, Renault Trucks volvió a presentar ciertas mejoras en uno de sus buques insignia con una cadena cinemática diferente, puesta al día, y un nuevo motor DXi 12 de 440 o 480 CV. Un año después recibió el propulsor DXi 13 de 500 CV, adaptado a la norma anticontaminante Euro 5.

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A su vez, y como era de esperar en un modelo tan representativo, la serie especial Renault Magnum Vega de 2007 fue la antecesora de la Magnum Ruta 66, conmemorativa del primer viaje de un camión europeo por la Ruta 66 estadounidense, en el año 2008. Éste fue un año importante en la historia del Magnum ya que pasó a tener dos metros de altura en la cabina, lo que incrementó el espacio para el conductor y sus acompañantes. Además, se introdujeron las soluciones Optifuel para reducir el consumo de combustible.

Tras más de dos décadas en el mercado, el Renault Magnum estaba en plena forma, con motores que cumplían con la demanda europea, un diseño moderno y una cabina espaciosa y bien equipada. Argumentos no le faltaban para seguir al pie del cañón, al menos, otros 10 años más. Pero, ante las nuevas normativas y el avance de las tecnologías, finalmente, la serie Magnum fue sustituida en 2013 por los actuales camiones de la Serie T de Renault , una generación de productos en la que el fabricante francés invirtió más de 2.000 millones de euros para desarrollarla.

No solo por fuera. El interior era sumamente futurista y funcional al contar con piso plano.

Técnicos de desarrollo junto a la cabina rebatida con fácil acceso a toda la cadena cinemática.

Unos años más tarde llegó la segunda generación: misma esencia pero con una línea modernizada.