Kenworth prepara la máxima innovación para sus camiones en más de 100 años
Kenworth no solo actualiza y lanza nuevos camiones. Ahora innova el mundo de los pesados con un motor muy particular y distinto.
Kenworth, considerada una de las marcas más icónicas en la fabricación de camiones, está a punto de establecer un hito en su historia con la introducción de un motor de tecnología revolucionaria. En colaboración con Cummins, anunció que está en proceso de preparación el B6.7 Octane, el primer motor a gasolina desarrollado por Cummins en sus 106 años de historia.
Además de renovar y lanzar nuevos modelos, la firma norteamericana va por el liderazgo absoluto en el mundo de los pesados con una innovación que no se aprecia a simple vista, pero sí en el desempeño para el día a día. Cómo funciona, qué cambia y todos los detalles.
Un motor que rompe paradigmas
Hasta ahora, Cummins se había especializado en motores diésel y en algunas soluciones alternativas, como eléctricos, de hidrógeno y a gas. Sin embargo, el B6.7 Octane de Kenworth marca un cambio de dirección, porque introduce uno de gasolina o nafta en un segmento tradicionalmente dominado por el gasoil.
El B6.7 se basa en el conocido turbodiésel de 6.7 litros que equipa a la RAM 2500 y está siendo preparado para combinar la resistencia y confiabilidad del convencional con la simplicidad de la gasolina.
Y no solo eso. Esta mecánica se distingue por su capacidad de funcionar con combustibles alternativos como GNC (Gas Natural Comprimido), GLP (Gas Licuado de Petróleo) e incluso hidrógeno, lo que le brinda una versatilidad sin precedentes en el sector. Esto representa un paso adelante en la evolución de los camiones comerciales, dado que permite a las empresas reducir costos operativos y emisiones sin perder eficiencia.
Cuánto rinde este nuevo motor de Kenworth
El B6.7 Octane produce 305 CV y 660 lb-pie en su versión más potente, mientras que las más económica oscilará los 200 CV y 600 lb-pie. Otro punto a destacar es que, pese a ser a gasolina, que tradicionalmente consume más que el diesel, desde Cummins aseguran que la autonomía, con la misma cantidad de litros, será de alrededor de 10% más.
Una de las principales ventajas de este propulsor es su capacidad de adaptarse a distintas condiciones de trabajo. Desde largas rutas en carretera hasta labores de carga en entornos urbanos. Así, el B6.7 Octane promete un desempeño fiable y robusto. Si se considera además su diseño innovador, podría ser una opción viable para flotas de transporte que buscan reducir costos de mantenimiento y operación.
A la espera de nuevas confirmaciones, los rumores indican que el primer B6.7 Octane será incorporado en los camiones rígidos de Kenworth, especialmente en los modelos T180, T280, T380 y T480. Sería nada menos que el inicio de una nueva era en el transporte de carga, con menor contaminación, más cuidado del medioambiente y adaptabilidad.
De todos modos, no está confirmado si este motor se expandirá, o no, a otros segmentos, pero su potencial es evidente y, por lo tanto, las expectativas son optimistas. Kenworth está listo para celebrar su legado con una revolución en su línea de productos, y el B6.7 Octane sería el puntapié inicial para una transformación histórica en la industria del transporte de carga. Ese es el objetivo a mediano plazo.