Este Mercedes-Benz conquista Europa: máxima capacidad de carga y durabilidad asegurada

Luego de ocho años y más de 500.000 kilómetros recorridos Bolk Transport renueva parte de su flota más pesada con dos Mercedes-Benz Arocs 8×4 para su uso en el transporte de larga distancia. Estas unidades pesadas incorporan un motor de 630 CV y ​​un acoplamiento hidráulico. De esta forma son capaces de transportar hasta 250 toneladas. 

Con una cabina de conducción muy cómoda que incluye una cama espaciosa, un sistema de aire acondicionado fijo y un frigorífico con congelador estos Mercedes-Benz Arocs le permiten al conductor realizar grandes distancias de forma muy confortable. A pedido de la empresa, las unidades salieron de fabrica pintadas con el color verde oscuro corporativo de Bolk Transport.

Mercedes-Benz: garantía de confort para los conductores

Erik Maassen van der Brink, Director de Bolk Transport sostuvo que estos camiones tienen que enfrentarse a tareas de transporte mucho más duras que los camiones convencionales. Anteriormente las unidades de Mercedes-Benz ya demostraron su impresionante  durabilidad y por eso la empresa volvió a confiar en ellos:  “La fiabilidad técnica y nuestra experiencia acumulada durante muchos kilómetros a plena carga son criterios decisivos para nosotros a la hora de comprar nuevos camiones».

Estas unidades incluyen un confort destacable que le facilitan la tarea a los conductores en sus largas jornadas de trabajo. Entre los principales puntos se destacan numerosos compartimentos de almacenamiento, una cómoda cama espaciosa, sistema de aire acondicionado y un frigorífico con compartimento congelador.

La clave del acoplamiento hidráulico en las pesadas cargas de Bolk

Los nuevos Mercedes-Benz Arocs están equipados con un motor de 630 CV y acoplamiento hidráulico. De esta forma pueden transportar un conjunto con un peso total de hasta 250 toneladas. Bolk Transport se encarga de realizar el transporte de transformadores pesados ​​y componentes de turbinas eólicas por Europa, entre otras cosas. 

Estos camiones, cargados con maquinaria o mercancías pesadas tienen que subir y bajar pendientes, lo que implica mucha aceleración y frenado. El acoplamiento hidráulico es clave a la hora de realizar estos trabajos. Con su ayuda, los conductores pueden desarrollar los acoples con suavidad y precisión. Esto implica un funcionamiento perfecto y un desgaste menor a lo largo del tiempo ya que minimiza los golpes y las vibraciones.

Bolk Transport, de Almelo (Países Bajos), se dedica a distintas soluciones de transporte pesado. Estos traslados exigentes se realizan en toda Europa y Bolk confía desde hace tiempo en los camiones de Mercedes-Benz para esta tarea.

El sistema de acoplamiento funciona mediante un fluido hidráulico que permite que el motor y la transmisión se conecten y desconecten suavemente, lo que facilita el arranque y el cambio de marchas. De esta manera las unidades pueden manejar cargas pesadas y proporcionar una mejor respuesta en situaciones de arranque y parada. 

La relación de Heineken con Bolk

Desde hace más de 80 años ningún desafío es demasiado grande para Bolk Transport. Desde la empresa se aseguran que su personal y sus unidades se conviertan en soluciones que traspasan los límites imaginados. 

La historia de esta compañía de transporte comienza en 1934 con la fundación de la empresa Looms & Bolk. La misma se encargaba del transporte de bebidas y carbón. Jan Bolk continuó el camino independientemente de la casa paterna y tras su fallecimiento en 1962, Henk Bolk, que entonces tenía 20 años, se hizo cargo. 

Durante los años 1960 y 1970, la empresa comenzó a encargarse del transporte de cerveza Heineken, la carga se transbordaba en Almelo para su distribución en la región. La relación con Heineken persiste hasta la actualidad. En 1985, la empresa inició el transbordo de contenedores marítimos que se entregaban en tren desde Rotterdam hasta la estación de Almelo. Además, la división Bolk Container Transport se encargó del transporte previo y posterior de contenedores por carretera.

El crecimiento de la compañía Bolk decidió en 1986 construir una nueva sucursal en Beatrix de Rijkweg en Almelo. El nuevo edificio ofrecía espacio para la planificación, la administración, una sede de la empresa y un almacén que actualmente se utiliza como taller. 

Además del transporte de contenedores y la distribución de catering, Bolk siguió desarrollándose en el transporte cubierto normal con distintos clientes como Grolsch, Apollo Vredestein y Ten Cate. Con el tiempo la empresa se enfocó en transportes pesados de larga distancia.

A principios del siglo XXI se inicia el transporte de piezas de aerogeneradores, una nueva actividad en la que cada vez se empujan más los límites de dimensiones y pesos. En la actualidad, Bolk es una de las empresas de transporte más confiables e innovadoras, un socio comprometido en el almacenamiento y logística de distintos productos.