Test Drive: Mercedes Sprinter Furgón Mixto 4+1 (1ra parte)
Nos subimos a la última novedad de la casa de la estrella: la Sprinter Furgón Mixto 4+1 Edición 25 años. Primera parte de la extensa prueba.
Con más de siete años ininterrumpidos liderando el nicho de utilitarios grandes en Argentina, Mercedes-Benz lanzó esta edición especial de la Sprinter para celebrar sus 25 años de producción local y ampliar su espectro frente a la creciente demanda de vehículos utilitarios.
Disponible en versiones Furgón y Mixto, nos subimos a esta última que suma una imagen y elementos extras que la diferencias del resto de la gama. Un modelo para el trabajo y el ocio en familia. Cualquiera le sienta muy bien.
La Sprinter y otra edición especial
Mercedes-Benz nos tiene acostumbrados a lanzar ediciones especiales de la Sprinter sobre todo desde la última década, en la cual tuvo diversas configuraciones que ganaron un plus en imagen, seguridad o confort, siendo algunas de ellas replanteadas a lo largo del tiempo debido a que las unidades limitadas fueron por demás escasas, ya que los clientes vieron en ellas un diferencial exclusivo para su empresa al momento de realizar su labor de logística.
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Atento a esta demanda, que creció considerablemente en estos últimos años y vio nacer a versiones como la Black, Silver y Fest, la casa de la estrella aprovechó las Bodas de Plata del Sprinter en Argentina –sí, se produce desde hace 25 años en Virrey del Pino– y los 70 años de la marca como terminal nacional para lanzar esta nueva edición especial.
Disponible en dos configuraciones (Furgón 3665 y Furgón Mixto 4+1 3665), estuvimos un día completo repartiendo revistas por la ciudad y, de paso, le hicimos el favor a un amigo de la casa y le llevamos un lavarropas hasta su domicilio (continua en parte 2).
Primeras impresiones
Le juega en contra: La visión hacia atrás se ve opacada por el parante de la ventana, sobre todo el del lado conductor. Otro punto que resulta extraño es que las manijas para subirse están en la puerta y no en la cabina, siendo que hay que pegar un saltito para subirse al Sprinter. Dos temas de diseño que perjudican al usuario.
Bien presentadas: Nos sorprendió gratamente el sistema de doble ventanilla para las plazas traseras. Lógicamente, es una “obligación” ofrecerlas en una opción como con doble plaza, pero es para destacar la calidad del cierre y el comando para accionarla.
Veo veo: Sin contar el pulcro tapizado de techo en material tipo aislante, al igual que el piso y parte de los laterales, la iluminación en general es digna de mencionar: un gran plafón principal configurable y cuatro luces superiores a lo largo de toda la segunda fila y caja de carga.
Baulerita: A diferencia del furgón, que ofrece dos butacas delanteras pasa pasajeros con una gran baulera debajo de los cojines, esta variante mixta mantiene la esencia pero en envase chico. Dos pequeños recovecos se ubican en la parte inferior lado acompañante: una guantera con tapa debajo del asiento y otra donde se aloja las herramientas de auxilio.
