Encuentran un clásico auto Renault de los ’80 con carrocería pick up, ¿Lo conocías?
Uno de los modelos más emblemáticos de la marca parece ser que tuvo una versión inédita que muchos desconocen: de auto a furgón, y de furgón a pick up. Mirá de cual se trata.
La pick up siempre fue un vehículo de trabajo que resolvió buena parte de la logística de las empresas en las décadas pasadas. Así como los furgones, existieron unidades fuera de serie que no tuvieron el aval de los fabricantes pero fueron desarrollados meticulosamente para ciertas tareas.
El Renault 4, fue un auto clásico lanzado en 1961 que fue reconocido por su versatilidad y longevidad. Sin embargo, una de sus versiones más intrigantes y poco conocidas es la Renault 4F pick up. Esta inédita versión nace de una transformación a partir del modelo furgón, es decir, no se trata de un vehículo producido en serie sino de un artesano que utilizó toda su imaginación.
Renault 4F pick up: un modelo único que pudo ser un éxito
La Renault 4F pick up es una de las versiones más extrañas y enigmáticas de este icónico auto compacto. Con solo dos unidades conocidas en España, su origen es un misterio que llamó la atención de los fanáticos del modelo de la marca del rombo, que en esta oportunidad fue destinado inicialmente al uso en aeropuertos, según cuentan en el sitio Escudería.
Lo que más llama la atención del diseño de la Renault 4F pick up es que se destaca por ser una modificación simple pero funcional. Se eliminó parte del techo trasero del furgón, creando un pequeño espacio de carga en la parte posterior, algo similar a lo ocurrido con esta Ford Ecosport.
La ventana lateral y el hueco detrás de los asientos delanteros sugieren que esta transformación se realizó sobre la versión mixta, con asientos traseros. Pese a estas modificaciones en la carrocería, el motor de 845 cc permaneció intacto, manteniendo las características mecánicas que hicieron al Renault 4 tan confiable.
Estas pick up se distinguían por su llamativa pintura amarilla, propia de los vehículos aeroportuarios, junto con una luz rotativa en el techo para mejorar su visibilidad. Aunque las dos unidades conocidas fueron restauradas, una de ellas, exhibida en el Museo Aeronáutico de Málaga, España, conserva los rótulos «Follow me» en la puerta y «Sígueme» en la caja trasera, por lo que se trata de un vehículo guía de aviones.
Uno de los aspectos más intrigantes de la Renault 4F pick up es la falta de información sobre su fabricante. Se desconoce si estas modificaciones se realizaron en España o si fueron encargadas a Francia, donde se ensamblaban estos modelos. Además, fueron encontradas algunas versiones similares pero basadas en el Renault F6, lo que suma más misterio a esta historia.
En cuanto a las unidades españolas, una lleva matrícula de Valladolid, con fecha de fabricación en 1980 y un odómetro que marca 28.777 kilómetros, lo que podría ser verídico debido a su uso limitado en aeropuertos. La otra unidad, restaurada en Málaga, fue fabricada años antes de su matrícula en 1992, y aún mantiene sus distintivos de aeropuerto.
También se especula con la posibilidad de que exista una tercera unidad, aunque los detalles sobre su paradero y estado actual son confusos. De confirmarse, esta tercera pick up sería una pieza clave para comprender mejor la enigmática historia de este modelo.
La Renault 4F pick up sigue siendo un enigma que despierta el interés de los coleccionistas y amantes de los coches clásicos. Su aparición en eventos y museos, junto con el misterio de su origen, la convirtieron en una auténtica joya dentro del mundo del automóvil clásico. Aunque nunca fue un vehículo de producción en masa ni un modelo icónico, su singularidad y función práctica en los aeropuertos la transformaron en un clásico deseado por muchos.
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