De insignificante a la más bestial: la pick up japonesa que compite contra Toyota Hilux

Una pick up aparece entre las más destacadas y no por cómo luce en sí, sino por el hecho de pasar de ser una vez y de una marca que perdió terreno en los últimos años a competir en lo más alto. Con la misma estructura y esencia, esta Mitsubishi L200 Triton tiene nuevos accesorios que la hacen deportiva, ideal para el off-road y muy satisfactoria.

Esta camioneta recibió una serie de modificaciones por parte de la empresa especializada en off-road Ironman 4×4 para dar un salto significativo tanto en estética como en rendimiento. Así, pasó a posicionarse como una firma rival de la Toyota Hilux.

El renacimiento de la Mitsubishi L200, pero no como nueva

La Mitsubishi L200, un modelo que ya tenía una buena reputación en el mercado, fue transformada por Ironman 4×4 en una máquina todoterreno aún más robusta y funcional para competir en lo más alto de las pick ups. Estas mejoras buscan satisfacer las necesidades de los entusiastas del off-road, un segmento que no deja de crecer.

Entre las modificaciones más destacadas se encuentran las defensas frontales, conocidas también como bull bars, que están fabricadas en acero y vienen en tres posibles diseños para contribuir a un aspecto más agresivo. Asimismo, las extensiones de guardabarros son ideales para acomodar a los neumáticos más grandes y anchos y proporcionar mayor estilo.

Por otra parte, el paragolpes de esta L200 incluye un enganche para una capacidad de remolque y versatilidad superiores. Esto, además, se complementa con un kit especial de suspensión que hace que andar en esta pick up sea único.

Diseño especial y para los más exigentes

Ironman 4×4 trabajó incesantemente en cada detalle para convertir a la L200 en una pick up lista para cualquier desafío. Además de los accesorios mencionados, está previsto lanzar próximamente un conjunto adicional de componentes, entre ellos un protector de caja, estribos laterales y portaequipajes.

Estos no solo mejoran la capacidad del vehículo para enfrentar condiciones extremas. También aumentan su funcionalidad en el día a día. Es justamente lo que explica por qué la L200 pasa de ser una pick up más a poder disputarle el liderazgo a la Toyota Hilux y Ford Ranger, entre otras.

Motor y rendimiento: qué cambia en esta renovada pick up

Las modificaciones en esta Mitsubishi L200 se han centrado en la estética y las capacidades todoterreno, por lo que el motor original de la Mitsubishi L200 permanece intacto. Es decir, sigue siendo el 2.4 Bi-TurboDiesel de 204 CV, acoplado a una transmisión automática de seis velocidades.

Más allá de las modificaciones, está claro que se trata de un modelo único. Aparte de los accesorios que se le añadió, el hecho de ser transformado por Ironman 4×4 lo hace más llamativo y deseable. Es difícil hablar compararlo con una Hilux dado que no es original, pero sí a partir de que se le da un salto de calidad que lo puede llevar a lo más alto.