Antes de Amarok, esta fue la primera pick up diseñada por VW que no llegó a producción
La pick up en cuestión fue diseñada sobre la base de un conocido sedán de la década de los ’80. El encargado de darle forma, publicó sus dibujos en sus redes.
Así cómo la pick up número dos a nivel nacional, hablamos de la VW Amarok, tuvo su desarrollo años antes de su lanzamiento oficial en 2010, en la década de los ‘80 existió un proyecto para desarrollar una camioneta que hubiera sido la antesala a la producida en Pacheco.
Diseñada sobre la base de uno de los sedanes regionales más grandes que tenía Volkswagen en ese momento, apenas algunos bocetos quedaron vivos. Y fue Luiz Alberto Veiga, uno de los responsables del departamento de diseño de la filial brasileña de la marca alemana, quien decidió difundirlos.
Para ello utilizó su cuenta personal de Instagram, donde publicó algunas imágenes de los prototipos que nunca llegaron a producción. El mismo fue diseñado sobre la base del Volkswagen Santana, el sedán del segmento D que estaba basado en el Carat.
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Si bien fue un auto muy exitosos en Brasil (cosechó buenas ventas también en Argentina) nunca tuvo una variante con caja de carga, ya que solo se conocieron la silueta de tres volúmenes y una rural.
La pick up sin nombre
Los bocetos mostrados por el ex diseñador de Volkswagen (al final de la nota) permiten tener una idea de cómo hubiera sido la inédita pick up. Una de las imágenes es el dibujo inicial hecho a mano, mientras que en la segunda página aparece ya el prototipo, donde claramente se distingue el sector delantero del sedán con el agregado de la caja de carga.
Algo que no deja de ser curioso, más allá de las líneas de un vehículo que nunca llegó a producción ni se lo vio por las calles, es el hecho de que la caja utilizada en el prototipo de esta pick up es muy similar a la que tenía la Toyota Hilux de aquellos años.
Esto tiene un poco de sentido si tenemos en cuenta que ese modelo de Toyota se vendió con el emblema de Volkswagen y otra denominación en algunos mercados europeos por un acuerdo comercial entre ambas automotrices.
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Además, si tenemos en cuenta que se trata de un prototipo de los años 80, en la trompa ya se distingue una línea más moderna, con rasgos que adoptaría unos años después el Ford Galaxy que llegó a nuestro mercado como parte de la asociación Autolatina entre la marca norteamericana y Volkswagen.
En el posteo de Instagram, Veiga destacó: “Esta propuesta derivada del Santana fue realizada íntegramente por el área 17, con algunas recomendaciones del centro de diseño de Volkswagen. Al final, como en otras investigaciones, el proyecto no consiguió el rendimiento financiero necesario para justificar las grandes inversiones”.
