2 camiones en 1: presentan un remolque eléctrico con forma de cabina para mayor autonomía
Una startup de vehículos eléctricos ofrece a las flotas de camiones un módulo tipo semirremolque para disminuir emisiones y elevar la autonomía.
Dicen que los camiones impulsados a diésel tiene los días contados, pero lo cierto es que esto es solo una suposición, al menos de acá a las próximas dos décadas. Europa apuesta plenamente a los eléctricos pero el resto de las regiones no poseen una infraestructura capaz de solventar las recargas.
Algunos fabricantes ven al gas, en sus diferentes tipos, o a la pila de hidrógeno como el futuro próximo, pero… ¿Qué pasaría si los camiones a diésel pudieran tener los beneficios de un semirremolque eléctrico con velocidades de «recarga» extra rápidas sin tener que modificar su condición?
Esta es la idea básica detrás de Revoy, una startup de camiones que quiere colocar baterías eléctricas modulares intercambiables y módulos de tren motriz entre los semitractores y remolques existentes para ampliar el alcance y la eficiencia.
Revoy y su apuesta por camiones a diésel con módulos eléctricos
Esta tecnología desarrollada por la empresa Revoy consta de un segundo semirremolque conectado al equipo, es decir, al frente estará el tractor diésel normal, detrás el semi y en el medio de ambos se conectará a la quinta rueda el módulo en cuestión.
Esta especie de “cabina extra” tiene su propia batería de 525 kWh y un gran motor eléctrico que impulsa un solo eje. Si bien las especificaciones son mínimas y probablemente optimistas, ya que reflejan circunstancias y cargas ideales, la compañía afirma que su vehículo complementario agrega 250 millas de alcance, unos 400 kilómetros.
Ahora bien, ¿cuánto tiempo llevaría recargar 525 kWh en una estación de carga? Probablemente lleve mucho tiempo. Es por eso que el modelo Revoy ni siquiera prevé que los usuarios carguen las unidades.
Según la empresa, los camiones deberán ser trasladados hasta un centro (que con suerte estará camino a su destino) y detenerse. Allí, personal idóneo desacoplará el remolque y traerá un nuevo módulo EV 100% cargado –al ser autoalimentado, parece maniobrará solo o por control remoto–, y lo conectará tanto al camión como al semi.
Todo esto parece ser bastante caro, pero se basa en un modelo de suscripción sin pago inicial con varios niveles. Después de las tarifas, Revoy imagina que los operadores de flotas ahorrarán entre un 5 y un 10 por ciento en términos de costos de combustible bruto. Lo cual, de ser cierto, es bastante bueno, ya que los costos generales más bajos se combinarían con una reducción de las emisiones de carbono y partículas del diésel.
Más allá de esto, existen otros beneficios como una capacidad de frenado adicional a través del frenado regenerativo del módulo y aceleración mejorada. Pero también contras: cuando se agota la energía del módulo, los camiones simplemente vuelven a andar a diésel y continúan adelante con un “peso muerto” extra.
A su vez habrá que tener en cuenta que la ley federal limita cada camión a 80.000 libras brutas. El módulo Revoy, pese lo que pese, reducirá la carga útil máxima. Por lo tanto, podría ser más adecuado para logísticas que alcancen la carga útil máxima normal menos el peso agregado del módulo.
La compañía tiene una estación de intercambio operativa en Dallas y planea llevar más a otras ubicaciones en Texas, así como a Arkansas, California y Oregón, probablemente a lo largo de rutas comerciales populares de camiones. Es una idea convincente que aborda muchos de los problemas inherentes a la electrificación de camiones pesados y un enfoque muy diferente al, por ejemplo, del Tesla Semi totalmente eléctrico.