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La pick up que no fue: el superdeportivo norteamericano que se transformó por una crisis

Pontiac G8 ST es el nombre de un vehículo único que se fabricó como pick up deportiva y se transformó por una crisis

Pontiac G8 ST 1

En el mundo del motor suelen surgir combinaciones inesperadas que desafían las convenciones y despiertan la curiosidad de los entusiastas. Uno de estos casos fascinantes y prácticamente únicos es el del Pontiac G8 ST, un modelo que pasó de pick up a sedán deportivo.

En un audaz intento de fusionar la potencia de un muscle car con la versatilidad de una pick up, la recesión de 2008 en Norteamérica cambió por completo los planes. Primero para mal, pero luego el resultado fue inesperado.

La historia del G8 ST, la pick up deportiva que se convirtió en muscle car

El G8 ST hizo su primera aparición en el escenario mundial en el Auto Show de Nueva York de 2008 como una creación única que fusionaba lo mejor de dos mundos. Inspirado en el Pontiac G8 Sedán, que a su vez tomó prestadas sus raíces del emblemático Holden Commodore australiano, prometía llevar la experiencia de conducción deportiva a nuevas alturas.

Con un robusto motor V8 de 6.0 lts, capaz de desarrollar 361 CV, este superdeportivo ofrecía un rendimiento excepcional y uno de los más considerables de aquel entonces, junto con una caja de carga que servía como herramienta de trabajo versátil. Esta, de hecho, contaba con 1.87 metros de largo y una capacidad de 1209 litros. 

Pontiac G8 ST como pick up original

revista tm digital

Así, estaba lista para proclamarse como la pick up más destacada. Y con un agregado nada menor: podía acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 5.4 segundos para combinar total versatilidad con deportividad. Es decir, era la ideal tanto para los entusiastas del rendimiento como para quienes necesitaban un vehículo resistente para el trabajo diario.

¿Por qué pasó de pick up a sedán?

A pesar de todas sus promesas y su indudable potencial, el Pontiac G8 ST se vio obstaculizado por las circunstancias adversas. La recesión económica de 2008 golpeó con fuerza a la industria automotriz y obligó a General Motors a tomar decisiones difíciles para asegurar su supervivencia. Significó concretamente el fin de este modelo que, luego, terminó siendo un sedán de altas prestaciones.

Pontiac G8 ST de pick up a sedan siempre deportivo

Es cierto que no llegó a materializarse en las carreteras de Estados Unidos y más allá. Igualmente, el legado del Pontiac G8 ST vive en la imaginación de aquellos que soñaron con su audaz fusión de deportividad y funcionalidad. 

Asimismo, el breve paso en la escena automotriz sirve como un recordatorio de que, a veces, las mejores ideas pueden ser víctimas de fuerzas más allá de su control. Así como muchos proyectos parecen insignificantes y después superan todas las expectativas, en este caso sucedió lo contrario.