Honda Ridgeline 2026: la pick up que busca seguir vigente en un mercado cada vez más competitivo
La Honda Ridgeline 2026 suma leves cambios estéticos y subas de precio, pero sigue sin renovar su mecánica frente a rivales más modernos.
La Honda Ridgeline recibió una actualización en Estados Unidos para el modelo 2026. Se trata de una pick up mediana con más de una década en el mercado, que siempre se diferenció de sus rivales por un enfoque distinto: construcción monocasco en lugar del clásico chasis de largueros, y un planteo más cercano a un SUV en términos de confort y manejo.
Ese posicionamiento alternativo le permitió destacarse frente a competidores como Ford Ranger o Chevrolet Colorado, pero con el paso de los años la falta de renovaciones profundas dejó en evidencia cierto desgaste. La actual segunda generación, lanzada en 2017, solo recibió retoques estéticos y de equipamiento, sin grandes avances en tecnología ni en la oferta mecánica.
Los cambios en la gama 2026
A pesar de los aumentos de precio, la marca japonesa incorporó algunas novedades en la gama 2026. En la versión TrailSport aparece un nuevo color exclusivo, el Verde Ceniza Metalizado, ya visto en otros modelos de la línea TrailSport como el Passport y el CR-V híbrido. La idea es ampliar las posibilidades de personalización, aunque no se trata de un cambio estructural.
Por su parte, la Black Edition ofrece la opción de un techo en contraste pintado en negro o en el mismo color de la carrocería. Entre los tonos disponibles se destacan el Sonic Gray Pearl y el Platinum White Pearl, pensados para reforzar el atractivo visual. Sin embargo, no hay modificaciones en motorización, sistemas de seguridad ni tecnología embarcada.
En síntesis, la actualización de la Ridgeline 2026 responde más a ajustes estéticos que a un rediseño profundo, lo que limita su capacidad de competir con productos más modernos del segmento.
Precios en Estados Unidos
La gama completa de la Honda Ridgeline aumentó sus precios para 2026. La versión Sport, de entrada, pasó de 40.150 a 40.595 dólares. La RTL, ubicada en un nivel intermedio, subió de 42.980 a 43.395 dólares.
La TrailSport, con perfil aventurero, registró el aumento más fuerte: de 44.380 a 45.795 dólares, lo que implica un salto de 1.415 dólares en un año. Finalmente, la Black Edition, tope de gama, pasó de 46.750 a 47.195 dólares.
A estas cifras se suma un cargo de destino de 1.495 dólares, también incrementado respecto al año anterior. Con estos ajustes, la Ridgeline se posiciona entre las pick ups medianas más caras de su segmento, sin ofrecer novedades mecánicas o tecnológicas que justifiquen plenamente la diferencia.
En comparación, la Ford Ranger 2025 arranca en Estados Unidos desde unos 33.350 dólares y puede superar los 57.000 en la versión Raptor. La Chevrolet Colorado, en tanto, parte de 31.900 dólares.
El desempeño comercial
En términos de ventas, la Ridgeline muestra un escenario mixto. En agosto 2025, las entregas cayeron un 9,4 % respecto al mismo mes del año anterior, lo que refleja cierta pérdida de impulso. Sin embargo, en el acumulado de los primeros ocho meses, Honda vendió 33.835 unidades, un 17,4 % más que las 29.100 registradas en igual período de 2024.
Estos números demuestran que, a pesar de su veteranía y de un nivel de actualización limitado, la Ridgeline mantiene un grupo fiel de clientes que valoran su comodidad, conducción suave y practicidad, frente a rivales más rudos y orientados al trabajo pesado.