Con base de Frontier y hasta 427 CV: la pick up que quiere destronar a Hilux y Ranger
Una histórica marca española vuelve al mercado con una pick up potente, moderna y con ambición de competir contra las líderes.

Santana Motors regresa a la escena automotriz con un proyecto ambicioso: la Santana 400, una pick up mediana desarrollada sobre la base de la Nissan Frontier que buscará competir directamente con referentes como Toyota Hilux y Ford Ranger en el mercado europeo. Por un lado, algo confiable como lo recientemente mencionado y, por otro, otras cualidades innovadoras para conquistar rápidamente al público y adquirir la popularidad que supo tener en el pasado.
Tras más de una década fuera de actividad, la histórica marca española reactivó su planta de Linares, donde ya se fabrican las primeras unidades. El regreso no solo representa una apuesta industrial, sino también una estrategia para posicionarse nuevamente en un segmento altamente competitivo y con cada vez más opciones.
Dos versiones de la Santana 400 y su enfoque tecnológico
La gama inicial está compuesta por dos variantes: la Santana 400D diésel y la Santana 400 PHEV híbrida enchufable. Ambas toman la arquitectura de la Frontier, aunque con ajustes propios y una identidad renovada. A simple vista, de hecho, queda en evidencia su personalidad propia y cómo se distingue por completo.
La variante diésel equipa un motor 2.3 litros que entrega 190 CV y hasta 500 Nm de torque, asociado a una caja manual de seis marchas o automática de ocho. Acelera de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos, alcanza los 170 km/h (la velocidad máxima está limitada) y ofrece una capacidad de remolque de 3.200 kg, con una carga útil de 815 kg. Dichos números confirman por qué reúne lo necesario para disputarle el liderazgo a la Hilux e incluso superar a la Frontier en la que se basa.

La gran novedad es la variante híbrida enchufable. Combina un motor naftero 1.5 litros, un motor eléctrico y una batería de 32 kWh para lograr una potencia conjunta de 427 CV y 800 Nm de torque. Acelera de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y puede recorrer hasta 120 km en modo eléctrico, con una autonomía total declarada de más de 1.000 km.
En equipamiento, la Santana 400 PHEV se destaca con tracción integral, faros LED, techo solar, estribos laterales y una fuente de alimentación externa de 6 kW. El interior incluye tablero digital de 10 pulgadas, pantalla central de 14,6 pulgadas, asientos calefaccionados y ventilados, climatizador bizona y cargador inalámbrico de alta potencia, entre otros ítems.
Las asistencias a la conducción están a la altura de los estándares actuales, con control de crucero adaptativo, frenado automático, mantenimiento de carril y detección de ángulo muerto en las versiones superiores. Así, se proclama como una de las pick ups más seguras y avanzadas, pensando tanto en el corto como en el mediano plazo.

En cuanto a precios, la Santana 400 PHEV arranca en 29.900 euros, mientras que la versión diésel llega a 44.700 euros. Es decir, una relación costo-calidad muy aceptable teniendo en cuenta lo que ofrece. Además, la marca anunció un acuerdo estratégico con el grupo chino BAIC para ampliar su gama y desarrollar futuros modelos, lo que abre un nuevo capítulo para una firma histórica que busca volver a ser protagonista.


