Mercedes y Volvo fabricarán celdas de combustible de hidrógeno
Una celda de combustible de hidrógeno convierte la energía química del combustible. El hidrógeno y oxígeno en el aire se transforman en electricidad.
En resonancia con el Green Deal europeo que establece un continente con transporte sostenible y libre de carbono para el 2050, dos de las compañías líderes en la industria de vehículos comerciales, Volvo Group y Daimler Truck AG, firmaron un acuerdo preliminar no vinculante para establecer un joint venture. Compuesto 50/50 por aportes de cada una de ellas, el acuerdo tiene la finalidad de desarrollar, producir y comercializar celdas de combustible de hidrógeno para aplicaciones en vehículos pesados y otros usos.
“El transporte y la logística mantienen el mundo en movimiento, y su necesidad continuará creciendo. Disminuir el CO2 se puede lograr a través de trenes de propulsión eléctrica o convirtiendo hidrógeno en electricidad. Para que los camiones puedan transportar cargas pesadas y recorrer largas distancias, las celdas de combustible son una respuesta importante y una tecnología en la que Daimler ha acumulado una gran experiencia en las últimas dos décadas a través de la unidad de negocios Mercedes-Benz Fuel Cell”, manifestó Martin Daum, Presidente del Consejo de Administración de Daimler Truck AG y Miembro del Consejo de Administración de Daimler AG.

Por su parte, Martin Lundstedt, presidente y CEO del Grupo Volvo, dijo que “el transporte de carga eléctrico es un elemento clave para alcanzar el Green Deal y un mundo libre de carbono. El uso del hidrógeno como combustible ecológico para alimentar camiones eléctricos en operaciones de larga distancia es una parte importante del rompecabezas y un complemento para los vehículos eléctricos con batería y combustibles renovables. Para que esta visión se convierta en realidad, otras compañías e instituciones también deben apoyar y contribuir a este desarrollo”.
Vale recordar que una celda de combustible de hidrógeno convierte la energía química del combustible, en este caso, hidrógeno y oxígeno (en el aire) en electricidad. La electricidad alimenta los motores eléctricos que sirven para impulsar un vehículo. Existen dos formas de producir el hidrógeno necesario. El llamado hidrógeno verde se puede producir localmente en la estación de servicio, utilizando electricidad para convertir el agua en hidrógeno. Mientras que la segunda alternativa, denominada hidrógeno azul puede producirse a partir del gas natural, utilizando la tecnología de captura de carbono para crear un combustible libre en carbono. El objetivo común es que ambas compañías ofrezcan vehículos pesados para aplicaciones de larga distancia con celdas de combustible de serie en la segunda mitad de la década.