Iveco Powerstar, el revolucionario camión italiano que acechó a los norteamericanos
Nacido especialmente para competir con los fabricantes estadounidenses, el Iveco Powerstar marcó un antes y un después al fusionar tecnologías de mercados muy dispares.
El Iveco PowerStar se hizo mundialmente conocido en la última década principalmente por haber vencido en más de una oportunidad al temible equipo ruso Kamaz en el Dakar, la competencia más extrema a nivel físico y mental en formato rally.
Estos camiones desarrollados para Oceanía a fines de la década del ‘90 son los únicos denominados convencionales (aquellos camiones con trompa) del fabricante italiano. La gama fue creada para competir de lleno frente a los modelos americanos en Australia y Nueva Zelanda, época en la los del norte dominaban ampliamente estos mercados.
Y no resultó ser un simple camión, ya que el Iveco Powerstar resultó ser revolucionario por tratarse del primero en incluir la fusión de tecnologías europeas con norteamericanas en un solo producto, algo que también lograron los Volvo VN y Freigtiliner Bussines Class, pero en menor medida al adaptar las cabinas europeas al formato “yankee”.
A diferencia del resto de los camiones de la marca italiana, el Iveco Powerstar no solo con motores Cursor, sino que también podía utilizar a pedido bloques Cummins y Detroit diésel junto a transmisiones Eaton. Con el paso del tiempo, el modelo pasaría a ofrecerse también en Europa bajo la denominación Strator que, incluso, estaba adaptado sobre la base del Stralis y fabricado por el importador del Iveco en Holanda.
Iveco Powerstar, el italiano con acento australiano
Como remarcamos al principio de la nota, el Iveco Powerstar fue lanzado a fines de la década de los noventa, pero lo que poco se conoce es que el camión fue desarrollado entre las filiales de la marca en Argentina y Australia. Incluso, llegó a comercializarse en Brasil, mercado que por aquel entonces pululaban los camiones con trompa de Mercedes-Benz y Scania.
Y si bien esta tendencia de cambiones “trompudos” quiso instalarse en países sudamericanos ya que los transportistas los veían como una solución al tener el motor delante para un mejor acceso en caso de mantenimiento o averías y evitar tener una cabina rebatible. A comienzos del nuevo milenio, esta idea se desvaneció y poco a poco los avanzados (frontales) comenzaron a copar las calles.
Este camión se produjo en Australia (le dejó su lugar al nuevo S-Way), Holanda y en Argentina –solo para ser exportado a Brasil y Venezuela, desde el año 1999 hasta el 2005, donde se montaron 121 unidades– basado en la arquitectura del viejo y querido EuroTrakker del que tomaba su chasis, cadena cinemática, cabina y suspensiones pero con las adaptaciones necesarias.
Con el paso del tiempo, el Iveco PowerStar fue evolucionando y terminó con una trompa más convencional que se produjo hasta hace muy poco en Australia y en formato CKD (kit para ensamblaje). Hoy este camión que se hizo famoso gracias al Team De Rooy que compitió en el Dakar, siendo vencedor de la competencia en dos oportunidades.
Fuente: dieciochoruedas