Elvis Presley y su pick up Chevrolet: una historia de poemas y canciones antes del éxito

La música no sería la misma sin Elvis Presley. No es algo que se pueda discutir, mucho menos compararlo con otros referentes del género musical denominado rock and roll. Su legado surgió una década antes que The Beatles, el cuarteto más influyente en la historia, y hoy continúa intacta.

No importa cuántos años se tenga. Algún abuelo, padre, tío o publicidad, Elvis Presley sigue sonando, desde una radio, tocadiscos, cassette, CD, o en cualquier plataforma como Spotify o YouTube. Es una leyenda viva y, como tal, empezó de cero como cualquier ser humano antes de convertirse en el Rey del Rock.

Elvis Presley y su querido camión Chevrolet

Elvis Presley se graduó de la escuela secundaria en 1953 y siguió los pasos de su padre, quien también era camionero. Después de probar algunos trabajos, el Rey del Rock consiguió uno en Crown Electric, una empresa de contratistas que actualmente es una de las más reconocidas en el estado de Atlanta, Estados Unidos.

Era 1954 cuando Elvis Presley dio sus primeros pasos arriba de un camión de reparto. Su compañero de jornada era una pick up Chevrolet con caja larga y de mayor tamaño que una convencional, pero diminuta si la comparamos con los camiones grandes que se conducen hoy en día.

Por aquellos años, el salario era de un dólar por hora trabajada, nada mal para un joven que se iniciaba en el mundo del comercio. Y aunque Elvis aceptó su nuevo trabajo, siempre supo que la música era el camino que quería seguir.

El peinado voluminoso y hacia atrás era el más popular entre los camioneros de la época, y Presley no dudo en adoptarlo en honor a su trabajo y a su padre. Años más tarde se convertiría en uno de sus tantos sellos característicos.

Mientras cumplía su jornada laboral, el gran músico llenó su tiempo libre en la carretera escribiendo poemas y frases de canciones. Incluso grabó a mano sus estaciones de radio favoritas en equipo de la camioneta para nunca ir a ningún lado sin su querida música.

Escuchando canciones se dejaba influenciar por lo nuevo y lo viejo que sonaba en las radios, tanto que se dice que su primera canción la pensó y la escribió  mientras manejaba su camioneta, mucho antes de lanzar Heartbreak Hotel, su primer éxito mundial.

Ese mismo verano en que Elvis Presley comenzó su carrera como camionero, intentó ingresar a la industria de la música. Una noche, cantó frente al veterano de la industria musical Eddie Bond, quien luego de escucharlo le dijo: «Sigue conduciendo un camión, nunca triunfarás como cantante».

Todos sabemos que Elvis no se limitó a conducir un camión y llegó a ser una de las celebridades más importantes de la música, pero la fama no mantuvo al cantante alejado de su compañero de carretera, ya que utilizó el mismo camión que conducía para Crown Electric como su vehículo de fuga incluso después de ser famoso.

La historia cuenta que Elvis se ponía una gorra y se subía al viejo y destartalado Chevrolet para evitar la multitud de personas que rodeaban su casa. Hacía recados, iba a ver a sus amigos o simplemente daba unas vueltas por su barrio. Ese era su refugio. Su tiempo de tranquilidad. Algo con lo que muchos camioneros de hoy en día se sienten identificados.