¿Por qué los choferes de un Tesla Semi eléctrico no quieren volver a conducir un camión diésel?

El Tesla Semi es un camión totalmente eléctrico que llegó para revolucionar el transporte de cargas de media y larga distancia gracias a sus prestaciones que, según Elon Musk (CEO de la compañía) y algunas empresas que lo operan, son realmente elogiables tanto en la velocidad crucero que desarrolla como en la autonomía durante una jornada de trabajo.

Sin embargo, y a pesar de estar a prueba desde fines del año pasado, el sector todavía se plantea una serie de preguntas, especialmente porque gran parte de la información técnica se desconoce por completo, ya que el fabricante no revela mucho sobre este camión eléctrico.

Los Tesla Semi van ganando terreno en la logística pesada y el cariño de los choferes

Hasta el momento, solo los responsables de la compañía Pepsico (responsable de Pepsi, 7UP, Gatorade, Lays y Doritos, entre otras) mostraron sus mapas de consumos y períodos de carga en tiempo real de los Tesla Semi que tienen en su flota, con resultados para ellos más que suficientes para cubrir sus logísticas en buena parte de Norteamérica.

Pero además ahora surge una clara aceptación por parte de los conductores que trabajan con los prototipos del Tesla Semi que es muy satisfactoria. Dejan Antunović, director de electrificación de Pepsico y responsable de las 36 unidades que operan en el transporte de alimentos y bebidas de Pepsi y FritoLay lo acaba de asegurar de forma abierta.

Para Dejan, la adaptación de los conductores a los camiones Tesla Semi fue muy fluida y su reacción a lo largo de los meses fue más que positiva. Hasta la fecha, toda la flota de camiones recorrió más de 3,8 millones de kilómetros sin que se haya reportado ningún problema grave.

Los conductores que operan estos camiones eléctricos recorren rutas de corta y media distancia. Al transportar snacks, que es una carga voluminosa pero liviana, el consumo energético es de 0,8 kWh por kilómetro recorrido, mientras que al transportar bebidas, que es mucho más pesada, se consume un 20% más, 1 kWh/km.

“Los choferes se acostumbraron fácilmente a los camiones eléctricos y la respuesta al cabo de unos días es siempre la misma: ‘no quiero volver a conducir un camión diésel’. Por los resultados y las opiniones que recabamos, sabemos que este es el camino a seguir y ya estamos a la espera de unas nuevas 50 unidades del Tesla Semi”, afirmó Dejan.

Según declaran desde Pepsico, una de las características más resonantes de un camión eléctrico es la nula sonoridad y cero vibraciones de la cabina, además de una maniobrabilidad aumentada. También un sector aplaude el modo de conducción central, ya que prevalece una mejor visibilidad.

El punto más negativo, aunque parezca mentira, no es la autonomía (se lograron 606 km con 37,5 toneladas de carga neta) ni mucho menos los tiempos de carga, sino el sistema de espejos mediante cámaras y pantallas. Es por eso que la flota de Pepsico cuenta en su totalidad con ambos sistemas, incluidos los espejos retrovisores convencionales, al menos por el momento.

Debido al impacto que genera en cada empresa que pisa un Tesla Semi, desde el fabricante confirmaron que están aumentando gradualmente la producción de este camión eléctrico en su fábrica de Nevada, y también están construyendo un edificio que se dedicará a la producción del modelo, que podría alcanzar las 50.000 unidades al año a partir del próximo año.