Camiones con fuselaje de helicóptero, el raro invento que nació a falta de vehículos
Durante un conflicto bélico a fines de los ’80, un pueblo decidió fusionar camiones con helicópteros para proteger a sus habitantes y a las propias tropas.
Los camiones son parte fundamental del desarrollo de cada país. Se lo puede utilizar para transportar todo tipo de carga y cuentan con la posibilidad de abastecer de lo esencial a cada nación atravesando sus ciudades de punta a punta.
Pero también son parte de muchas transformaciones que los hacen únicos, como por ejemplo los “muyahidines”, los camiones-helicóptero fabricados artesanalmente por el pueblo afgano para luchar contra las tropas de la URSS durante la invasión soviética que tuvo lugar de 1978 a 1992.
La historia detrás de los camiones con piezas de helicópteros
En términos de organización, las fuerzas muyahidines no eran como un ejército regular. En primer lugar, los afganos prácticamente no utilizaron equipo pesado en combate y sus operaciones se realizaron en unidades de infantería ligeramente equipadas.
Lo mismo ocurrió con el transporte, que en este conflicto se realizó principalmente con animales de carga y en vehículos pequeños como motos o todoterreno ligeros. Esto no significa, sin embargo, que no utilizaran camiones.
Algunos fueron confiscados a civiles y otros fueron capturados al ejército soviético. La mayoría de ellos se encontraban en condiciones deplorables y las precarias instalaciones mecánicas no eran aptas para reparaciones profesionales. Entonces hubo que improvisar y, seguramente, esta sea la causa del resurgimiento de los inusuales híbridos de camiones y helicópteros.
Los afganos “recibieron” mucho equipamiento para el conflicto por parte de los estadounidenses, que suministraron a las tropas afganas misiles FIM-92 Stinger que causaron verdaderos estragos entre las fuerzas aéreas soviéticas. Según algunas fuentes, se estima que derribaron más de 110 aviones y más de 330 helicópteros durante el conflicto.
Muchas de estas máquinas cayeron luego en territorios controlados por guerrillas que, aunque no contaban con fuerza aérea propia, decidieron utilizarlas para otros fines.
En las imágenes que publicamos junto a esta nota se pueden ver dos ejemplos de camiones con fuselaje de helicópteros. El primero de ellos se construyó sobre el Kamaz 53212, mientras que el segundo es una mezcla del chasis de un Mercedes-Benz no especificado y la cabina del GAZ-66. En ambos casos se utilizó como carrocería el casco del helicóptero Mi-8.
Ahora bien, ¿tenía algún sentido práctico esta fusión? El Kamaz contaba con una capacidad de carga de 10 toneladas, mientras que el peso total del helicóptero Mi-8 oscilaba, dependiendo de la versión y configuración, entre 6,5 y 8 toneladas completo (motor, accesorios y demás).
El casco en sí estaba hecho de aluminio liviano, no era pesado y podía montarse en camiones sin perder rendimiento. Esta estructura tenía ventajas en comparación con la carrocería estándar, ya que el compartimiento de transporte del Mi-8 podría trasladar hasta 24 soldados con equipo completo.
Además, los afganos obtuvieron dos aberturas de carga: una en forma de puerta lateral del helicóptero y otra en la parte trasera. No hace falta mencionar que gracias a las pequeñas ventanas, la carga transportada estaba mejor protegida de las condiciones climáticas y del fuego enemigo en comparación con una lona común.
Por las imágenes, la construcción general parece sólida, lo que nos da la sospecha que quizás existieran talleres especializados en este tipo de modificaciones. Por otro lado, se puede observar que el fuselaje del helicóptero parece estar soldado a la cabina, lo cual es un defecto de diseño, teniendo en cuenta que tanto el Kamaz como el GAZ-66 tienen cabinas basculantes.
A juzgar por el hecho de que estos camiones con fuselaje de helicóptero estaban desarmados, se puede decir que no fueron utilizados en combate, sino para transportar personas y suministros.