DAF Super CityTrain, el bus más largo del mundo que logró transportar a 350 pasajeros
Fabricado exclusivamente para prestar servicio en África a fines de los ‘80, el bus más largo del mundo continua teniendo el Récord Guinness.
Subirse al bus más largo del mundo para llegar a destino o por el simple hecho de saber qué se siente ya no es algo que se puede hacer hoy en día. A más de tres décadas desde su lanzamiento, aún mantiene el récord absoluto en longitud si bien dejó de prestar servicio hace varios años.
Este vehículo específico para transporte de pasajeros tuvo su auge a principios de la década de los ’90 en el Continente africano, más precisamente en la República Democrática del Congo, siendo que el primer prototipo comenzó a rodar allí en 1989 para comprobar su eficiencia en el campo.
A diferencia de los buses actuales, sobre todo los articulados, este raro espécimen se encontraba dividido en dos partes diferentes: el área de pasajeros y la cabina/tractor que impulsaba a este vehículo que se convertiría poco tiempo después en el bus más largo del mundo.
DAF y la idea del bus más largo del mundo
Si hay un vehículo que supera en cuanto a tamaño a todos sus rivales del segmento a través de los años, ese es sin duda el DAF Super CityTrain, catalogado el bus más largo del mundo por nada menos que el Libro Guinness de los Récords.
Para comprender mejor la excepcionalidad de este particular bus, basta pensar que un modelo convencional estándar suele medir entre 10 y 12 metros y ofrecer una capacidad para un máximo de 120 pasajeros, si bien los chasis articulados actuales logran duplicar estos números.
El DAF Super CityTrain, en cambio, mide prácticamente el triple de largo, exactamente 32,2 metros, y era capaz de transportar hasta 350 pasajeros cómodamente, si bien desde el fabricante aseguraban que en su pico máximo (con pasajeros apretados) podía superar las 400 almas. Una cifra que deja en ridículo a muchos aviones.
Su peso en vacío rondaba las 28 toneladas, el doble que cualquier bus convencional. Esto es porque dentro de sus características se encontraba un camión. Sí, como mencionamos al principio de la nota, el DAF Super CityTrains contaba con dos partes, siendo ella un tractor que arrastraba un semi muy especial que funcionaba como cabina separada para los pasajeros.
El camión en cuestión respondía a una unidad de la Serie FT2600 de DAF, un chasis 4×2 con cabina extendida y techo bajo, que se encargaba de remolcar el acoplado distribuido en un chasis escalonado tipo York de dos niveles diferentes y con dos salidas en cada lateral. Allí, se ubicaban 170 asientos por lo que ese desprende que las 180 personas restantes debían ir de pie, llegando así a la cifra mencionada anteriormente.
En un principio se fabricaron dos versiones del DAF CityTrain. La primera estaba equipada con un único remolque, mientras que la segunda se definió como “Super” al aumentar la capacidad hasta las 350 personas y convertirse en el bus más largo del mundo.
Al ser exportado y al cumplir su labor en suelo africano, no existe información certera sobre esta “bestia” del asfalto pero según la revista Commercial Motor, el CityTrain fue vendido a una empresa de autobuses de Kinshaha, capital del Congo.
Según cuentan los eruditos que lo conocieron, el bus más largo del mundo fue un gran éxito en esta parte del mundo y como resultado la empresa llegó a fabricar 55 modelos diferentes. Según algunas especulaciones, se comenta que también se llegó a fabricar una tercera versión del DAF Super CityTrain con capacidad para 500 pasajeros.